"Day after day, we are comming across with unexpected events which make our live a little adventure " (Enigman)

lunes, 15 de marzo de 2010

Ciprés

"La sombra del ciprés es alargada", publicada allá por el año 1948, es la primera novela de Miguel Delibes.


La novela cuenta la historia de Pedro, huérfano al cargo de un maestro en Ávila. El protagonista ha de enfrentarse a la muerte de sus padres, de su mejor amigo y. más tarde, de la mujer a la que ama. Sólo el retorno a Ávila le proporcionará cierto consuelo. En 1990, Luis Alcoriza, dirigió una película basada en esta obra de Delibes.
Imagen: planetalector.com 
 
 
Aquí dejo apenas dos párrafos de quien bien ha escrito de Miguel Delibes.


 

La sombra del ciprés

"Qué dulce y hospitalaria será la sombra de su ciprés. Ésa que pronto se alargará, con la estación florida, sobre la tierra que lo acoja en su seno. A él, que la trató con respeto, y la hizo prosa de grano duro, y la aventó como quien echa a volar un milano. Hay personas que con sus obras dan ejemplo del día, se cumplen a sí mismas, perseveran, se tornan incesantes como el rayo, declinan los honores vulgares o mezquinos, y van desenredando la verdad cuerda a cuerda, y hacen sólo con pasos su camino.


Miguel Delibes era profundo y claro. Era monotemático y complejo. Y tan sobrio, sutil, intenso y azulado como los cielos limpios de la estepa. Y se pasó la vida contando historias llenas, hablándonos de gente tenaz o naufragada, convirtiendo en un arma la inocencia o la pena, disputándole el voto a las urnas del alba y degustando a sorbos exactos un tesoro: el cáliz -sol y polvo- de Castilla blanca. Morirse así, de viejo, lúcido y casi, casi centenario,
es una última muestra de decoro."                                                                  Imagen: floresyjardin.es

Laura Campmany
ABC. 14-03-10

sábado, 13 de marzo de 2010

Ética



ÉTICA PARA AMADOR


"Este libro no es un manual de ética
para alumnos de Bachillerato"
(F. Savater)


Pues, con eso y con todo, lo hemos leído.
Porque...

"Ha sido pensado y escrito para que
puedan leerlo los adolescentes" (F. Savater)

Pues eso...


A ti que esto lees, te digo:
deja aquí testimonio
de tu pasar honrado por sus páginas.
Una cita, un breve comentario
y un clic ahí al lado
serán suficiente prueba de ello.


"Que nos aproveche a ambos" (F. Savater)


martes, 2 de marzo de 2010

Marta

Marta


Tardamos en ver un ombligo en el cine. El Código Hays lo consideraba una provocación erótica y lo prohibió hasta 1968. Ni siquiera salían váteres en las películas. «Al abrir la puerta de un cuarto de baño no podía verse la taza», reconocía Mankiewicz. El ombligo estuvo oculto hasta que los jóvenes de mayo se desabrocharon el cerebro, las braguetas y arrojaran los sostenes. Pasaron las generaciones y llegó la última, la 2.0, la de Tuenti, cuya bandera es su ombligo y el escudo, su piercing. El ombligo, vaso de la luna en el montón de trigo del Cantar de los Cantares, tiene un simbolismo de libertad pero en estos días adquiere un significado fatal porque aparece debajo de la blusa de Marta unos meses antes de ser asesinada. Como Ofelia, ha tenido una muerte cenagosa, pero no será náyade de la que broten fragantes violetas, ni flota como el gran lilio del poema de Rimbaud, entre los sauces tenebrosos del Guadalquivir de luto.

Seguimos siendo capaces de una ferocidad sin límites. Una barbarie ancestral permanece en nuestros inconscientes. Si no lo creen, miren a ésos que quieren linchar a los asesinos de Marta en la puerta del juzgado. La inclinación a la matanza tal vez apenas haya cambiado durante nuestra residencia en la Tierra. Sí ha cambiado el estilo. Miguel no es Pascual. Dice Pascual Duarte: «Yo, Señor, no soy malo. Los mismos cueros tenemos todos los mortales al nacer, y sin embargo, cuando vamos creciendo, el destino se complace en variarnos como si fuéramos cera y en destinarnos por sendas diferentes al mismo fin: la muerte». Pascual es la España agraria. Miguel, la sociedad de la comunicación. Pascual mata a la yegua, mata a la perra porque le molesta su mirada, mata a navajazos a su madre. Miguel asesina a una preciosa adolescente.Mata a una estrella por celos, por resentimiento. En Pascual asesina un yo salvaje, ignorante. A Marta la mata un idiota narcisista que ha tenido la oportunidad de pertenecer a la generación Einstein y se ha quedado en el suburbio del lenguaje apache y el torso desnudo. Ni es más listo, ni más rápido, ni más preparado, sino más psicópata. Así hay muchos. Papás, mirad los blogs. Los padres de esta generación nacida para chatear y trallar siguen en la inopia, en la carencia moral.

Esos ojos verdes, la camiseta donde pone Tarifa, es el retablo de una generación. El piercing no oye los sermones. Pero es necesario que les den a los adolescentes algo más que el móvil y les dejen chatear con homicidas en la almohada del mal. No es el destino el que nos varía como si fuéramos cera, sino la educación que, desde los griegos, es darle al cuerpo y al alma toda la belleza de que son susceptibles.


RAUL DEL POZO
El ruido de la calle
EL MUNDO, 19.02.2009

Imagen de adiosaloslibros.es